2017
Dear FutureMe:
Voy desde el pasado de hace siete años al futuro de cuandosea. Mi presente continuo ha tenido un alarde de mediocridad (asumiendo como positiva toda acepción relacionada con la palabra mediocre) y ha hecho un balance de 2017 que quiere que su yo del futuro próximo analice y deslice. En lugar de asumir como completo su final de año, ha escrito todo lo que ha considerado bello del año que acaba de pasar y ha hecho una lista de momentos. Dear FuturMe, repasa esto por favor, el día 27 de diciembre de 2018 y alarga la lista que dejaste hoy:
- He bebido txacolí en Bilbao con punkies guapísimos de cresta verde
- He conseguido meter un colchón inflable size King en una tienda de campaña para oompa
loompas a 40º sombra y sin comer
- He descubierto que el Sónar no es sólo un festival, es una ventana a otra dimensión
- He amado en trío a Rosalía
- He leído cuentos en voz baja antes de dormir a una personita que asentía sus dos años enteros a mi manera de exponer
- He escuchado Nuclear de Mike Oldfield hasta que me han sangrado los oídos
- He echado de menos el sonido del secador desde la cama, tanto que he odiado el silencio de las 7 a.m
- He comido rata al sur de América
- He vivido diez días de día al norte de Europa
- He desayunado vegemite, y me ha gustado
- He recibido un ramo de rosas en el Palentino
- He admitido que me gusta la moda de los dictadores sudamericanos y que son los precursores del chonismo contemporáneo
- He añadido a mi diccionario el concepto “tallarines de ligar” y no dudaré en usarlo
- He creído en el horóscopo más de tres días seguidos
- He sabido que el gris es mi color de pelo favorito
- He decidido que Oops I did it again es un temazo que debería ser versionado en acústico hasta con gallos
- He cambiado la cerveza por el vino (durante una tarde de cumpleaños)
- He llorado de verdad y he escuchado llorar de verdad
- He reído de verdad y he escuchado reír de verdad
- He descubierto lo que mola besar de mentira
- He re-descubierto que besar de verdad mola mucho más
Así que, Dear FutureMe, cuando leas esto 360 días después, y ya vuelvas a saber que Australia es sólo un país en las antípodas que te gustaría visitar, que Nuclear no se compuso en 2017 y que la cerveza no se cambia por el vino, recuerda puntuar en ataques de risa, de nuevo, lo que ocurrió en esos 360 días y llora a carcajadas, de verdad, una vez más.
Voy desde el pasado de hace siete años al futuro de cuandosea. Mi presente continuo ha tenido un alarde de mediocridad (asumiendo como positiva toda acepción relacionada con la palabra mediocre) y ha hecho un balance de 2017 que quiere que su yo del futuro próximo analice y deslice. En lugar de asumir como completo su final de año, ha escrito todo lo que ha considerado bello del año que acaba de pasar y ha hecho una lista de momentos. Dear FuturMe, repasa esto por favor, el día 27 de diciembre de 2018 y alarga la lista que dejaste hoy:
- He bebido txacolí en Bilbao con punkies guapísimos de cresta verde
- He conseguido meter un colchón inflable size King en una tienda de campaña para oompa
loompas a 40º sombra y sin comer
- He descubierto que el Sónar no es sólo un festival, es una ventana a otra dimensión
- He amado en trío a Rosalía
- He leído cuentos en voz baja antes de dormir a una personita que asentía sus dos años enteros a mi manera de exponer
- He escuchado Nuclear de Mike Oldfield hasta que me han sangrado los oídos
- He echado de menos el sonido del secador desde la cama, tanto que he odiado el silencio de las 7 a.m
- He comido rata al sur de América
- He vivido diez días de día al norte de Europa
- He desayunado vegemite, y me ha gustado
- He recibido un ramo de rosas en el Palentino
- He admitido que me gusta la moda de los dictadores sudamericanos y que son los precursores del chonismo contemporáneo
- He añadido a mi diccionario el concepto “tallarines de ligar” y no dudaré en usarlo
- He creído en el horóscopo más de tres días seguidos
- He sabido que el gris es mi color de pelo favorito
- He decidido que Oops I did it again es un temazo que debería ser versionado en acústico hasta con gallos
- He cambiado la cerveza por el vino (durante una tarde de cumpleaños)
- He llorado de verdad y he escuchado llorar de verdad
- He reído de verdad y he escuchado reír de verdad
- He descubierto lo que mola besar de mentira
- He re-descubierto que besar de verdad mola mucho más
Así que, Dear FutureMe, cuando leas esto 360 días después, y ya vuelvas a saber que Australia es sólo un país en las antípodas que te gustaría visitar, que Nuclear no se compuso en 2017 y que la cerveza no se cambia por el vino, recuerda puntuar en ataques de risa, de nuevo, lo que ocurrió en esos 360 días y llora a carcajadas, de verdad, una vez más.
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